"Imaginativo" altar de cultos que "perpetramos" para el Triduo Cuaresmal en honor de nuestros Sagrados Titulares celebrado en Marzo de 1990. No tiene precio.
En descargo de este "atentado" contra el buen gusto tengo que decir que eran otros tiempos, que teníamos pocos medios, que eramos jóvenes, que hemos madurado mucho, que blablablabla, que entonces había poco espacio para montar los cultos, allí, en la esquinilla aquella, y, claro, entonces le echábamos imaginación al asunto y salían este tipo de cosas. De cualquier manera, el altar es "pa" tirarnos al Darro a todos los que pusimos tornillos y empujarnos con maldad embovedao pabajo y luego sacarnos por los Sanchez de los pelos e ir dándonos capones desde una barca de remos hasta Puente Genil, provincia de Córdoba.
No olvidaré jamás cómo se gestó... Como apareció por allí uno de los encargados del montaje con un libro de artes escénicas abierto por el apartado de montaje de escenarios...sería la panacea... Cómo usamos las cortinas verdes de la Casa de Hermandad para forrar el altarico. Cómo pusimos los ángeles de la peana de salida de la Virgen con sendos incensarios, cómo pusimos al Señor mirando para el Este y a la Stma. Virgen para el Oeste, cómo aderezamos todo con florecillas silvestres de variopintos colores y con los cirios mirando pal Ferrol del Caudillo porque no había ni un candelabro tieso... ¡Qué satisfacción cuando acabamos! ¡Qué bonico estaba el altar! No, espera, qué os parece si ponemos la Cruz del Señor con un sudario... Ostras, qué chulo.
Y sobre todo, lo peor de todo, qué mala suerte que esto quedó inmortalizado per secula seculorum en la GEMISA....
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